Bitcoin es la criptomoneda más popular, además de ser la más valiosa dentro del mercado de las cripto divisas, representando también el 67% de la capitalización total de este mercado, sin embargo, actualmente existen más de 5,000 criptomonedas que se cotizan en alguno de los 200 exchanges.
Bitcoin se vale totalmente de la tecnología Blockchain, la cual básicamente permite guardar datos o información de manera pública e inalterable y de manera descentralizada. Además ofrece la posibilidad de crear nuestros propios tokens, esto tan fácil como copiar y pegar el código de una criptomoneda ya existente. Esto gracias a que Bitcoin y muchas otras criptomonedas son de código abierto, es decir, cualquiera puede utilizar y alterar su código como mejor le convenga y sin tener que pagar nada.
Ahora bien, crear una criptomoneda es la parte sencilla, lo difícil viene cuando queremos que tenga valor en el mercado. Existen casos de empresas que han creado su propia criptomoneda para proveer servicios de infraestructura de aplicaciones, servicios financieros, tokens y cobrar por esto en su propia criptomoneda para crear demanda y darle valor, algunos ejemplos serían: Ethereum, Nem y Waves. También se han creado criptomonedas respaldadas con activos financieros tradicionales; el ejemplo más popular es la Libra de Facebook.
Pero la parte interesante radica en ver el naciente mercado de criptomonedas que cada vez se diversifica más y que está pasando por una etapa de constante experimentación, buscando estándares en distintas industrias que empiezan digitalizarse y esto trae consecuentemente muchas oportunidades de inversión.
Sin embargo, si lo que se busca es invertir y eres nuevo en el terreno de las criptomonedas, lo más recomendable sería apostarle a las más grandes, pues las más pequeñas, al no ser tan conocidas, puede que presenten la dificultad de encontrar compradores al momento de querer venderlas.