México, a 11 de mayo.- Rodrigo Besoy destacó que aunque los indicadores de actividad económica e índices en México del primer trimestre del año, han mejorado en comparación con el cierre del 2020, una recuperación plena aún parece lejana. Por ese motivo, lo que necesita el entorno empresarial es llevar a cabo acciones que aseguren el patrimonio de los grupos generadores de empleo y riqueza. Por ello, las Oficinas Familiares siguen cobrando relevancia como elemento clave en el manejo del patrimonio familiar.
“Nos encontramos en un momento complejo, porque nuestra economía y el clima de negocios no acaba por estabilizarse. Al mismo tiempo, sabemos que una gran parte de nuestro entorno empresarial es altamente dependiente de lo que ocurre con nuestro vecino del norte (Estados Unidos) tanto en sus políticas monetarias como en sus planes de recuperación”, explica Besoy Sánchez.
Adicionalmente, el asesor patrimonial indica que la situación luce inmejorable para la proliferación de Oficinas Familiares que salvaguarden el patrimonio empresarial y garanticen tanto la rentabilidad como permanencia de las unidades de negocio. Rodrigo Besoy explica que muchas de estas han resistido a la etapa más inclemente de la pandemia, y con base en estrategias internas bien definidas, han salido adelante logrando subsistir al cierre de otras tantas empresas durante los últimos meses.
El especialista indica que las Oficinas Familiares como unidades operativas independientes pueden incrementar el patrimonio sostenidamente a través de una gestión financiera y fiscal prudente y eficiente, que permita la diversificación del core business, no solo de preservar el patrimonio de los grupos familiares que han despuntado tras lo más severo de la pandemia
“Recordemos que al poner en marcha una Oficina Familiar lo primero que hay que tener en cuenta son los deseos y necesidades del grupo familiar, así como el tamaño y complejidad de los activos y estructura de la o las unidades de negocio. Posteriormente, y tomando en cuenta que actualmente hay factores que influyen directamente en el desenvolvimiento empresarial, lo mejor es definir objetivos claros, alejados de la especulación, y con una estrategia a seguir en la que tampoco influyan factores macroeconómicos externos”, recomendó el especialista.
Por último, Besoy Sánchez subraya que algunas de las ventajas principales de instaurar una Oficina Familiar se encuentran en la facilitación de la sucesión de la empresa familiar; aligeran la carga fiscal de los propietarios; agiliza la toma de decisiones; profesionaliza la estructura del patrimonio familiar; diversifica, gestiona y analiza los riesgos derivados de inversiones inmobiliarias en private equity o venture capital; brinda soporte en liquidez a los socios.