Ciudad de México, 23 diciembre.- Para el especialista en tecnologías financieras, Alexis Nickin Gaxiola uno de los mayores retos para el ecosistema Fintech en el 202o, será sin duda fijar una regulación y un marco jurídico para su correcta operación. El experto explica que esta tecnología ha crecido en gran medida en la región y se ha desarrollado con gran rapidez:
“Los negocios de tecnología financiera, comúnmente conocidos como Fintech, han escalado con gran rapidez en América Latina. Esto se debe en gran medida a la apertura que se ha dado al ecosistema emprendedor en la región. Aunque en algunos países como México, se han logrado leyes que regulen en la materia, aún hace falta fortalecer el marco jurídico para garantizar no solo la correcta operación de este mercado, sino la competencia leal entre empresas y el verdadero beneficio de sus usuarios”, detalló Nickin.
De acuerdo con el Global Fintech Index City, un ranking presentado anualmente por Findexable, México, Brasil y Colombia son las tres naciones líderes de la región con mayor número de Fintech consolidadas, en fase de maduración o listas para escalar sus operaciones.
“El caso de México es muy particular. Desde hace poco más de 10 años, fuimos testigos de la apertura que se dio al ecosistema emprendedor y esto desde luego que generó confianza entre los inversionistas pues fue una señal de que existía un ambiente óptimo para comenzar a apostar y crear tecnología financiera”, explica el experto.
“En 2018, se trabajó la primera normatividad para que regulara al ecosistema digital financiero y este año lo vimos reflejado con la creación y aprobación de la denominada Ley Fintech. Que México se ubique sobre países como Brasil no es casualidad, es señal de que quienes integramos este nicho trabajamos en favor de generar condiciones idóneas para la inversión, para la modernización y para la competencia justa entre mercados”, enfatizó Nickin Gaxiola.
El experto ve como acierto el camino que se ha recorrido para tener una legislación en México, que deberá aplicarse a partir de 2020, enfocada a la promoción, consolidación, regulación y mapeo nacional de las Fintech, sin embargo, señala que el reto continuará para América Latina, con la finalidad de que la región tenga un marco regulatorio que facilite y fomente las buenas prácticas en torno a la tecnología financiera.
“De unos cinco años a la fecha, hemos podido ser testigos de cómo la economía digital ha encontrado en América Latina las condiciones para invertir y desarrollarse. Sin descuidar lo que hasta ahora se ha logrado, deberemos enfocarnos más en la parte de la regulación y dar muestra al mundo de que en nuestra región se apuesta por la modernidad”, enfatizó