En el marco de la revisión del T-MEC, Alejandro Martínez Araiza, secretario general del Sindicato Nacional Alimenticio y del Comercio (SNAC), participó en audiencias públicas en Washington D.C., tras ser invitado por el Departamento de Comercio de Estados Unidos.
La reunión congregó a funcionarios de los departamentos de Comercio, Estado, Tesoro y Trabajo de Estados Unidos, así como a representantes del movimiento sindical norteamericano, para analizar el futuro del acuerdo comercial regional.
Durante su intervención, el dirigente mexicano expuso una postura firme en defensa de los trabajadores, alineada en varios puntos con las posiciones de sindicatos de Estados Unidos y Canadá.
Como introducción, destacó la historia del SNAC y su lucha de más de 100 años por mejorar las condiciones laborales, fortalecer la libertad sindical y promover un sindicalismo auténtico.
Señaló además que el sindicato tiene presencia en cerca de 500 centros de trabajo y representa a empleados de empresas globales como Grupo Bimbo, PepsiCo, Mondelez, Hershey, Mars, Arcor, B-Connect, BYDSA de XIGNUX y PPG.
Para Martínez Araiza, esta representación otorga sustento y legitimidad a la participación del SNAC en debates regionales sobre derechos laborales.
Protección tripartita a los trabajadores
El líder sindical afirmó que la formalización del empleo en México y el fortalecimiento de las instituciones laborales benefician a toda Norteamérica, al elevar el bienestar regional.
Como único sindicalista mexicano convocado por el gobierno estadounidense, presentó la iniciativa denominada “Re-evolución laboral”, orientada a construir una visión común basada en igualdad de oportunidades, productividad y justicia social.
Enfatizó que la defensa de los derechos laborales sin fronteras es indispensable y reiteró que no puede existir comercio justo sin justicia laboral.
Entre sus propuestas para el T-MEC 2.0 destacó tres ejes: impulsar la formalización del empleo y salarios acordes a la región en México; ampliar el Mecanismo de Respuesta Rápida, aplicar el capítulo 23-A y proteger sindicatos auténticos; y anticipar los riesgos laborales asociados al avance tecnológico.
Alerta por migrantes de IA
Martínez Araiza alertó sobre los efectos de los llamados “migrantes de IA”, una metáfora para referirse a la Inteligencia Artificial proveniente principalmente de Asia, que podría desplazar a millones de trabajadores y elevar los costos de vida.
Por ello, llamó a establecer salvaguardas y marcos regulatorios que mantengan a la tecnología bajo control humano y al servicio de la sociedad.
Finalmente, recordó que el T-MEC es también un pacto social entre tres países. En la sesión de cierre, Andrea Rojas, del Departamento de Comercio de Estados Unidos, planteó la posibilidad de un salario base regional. El dirigente respondió que el objetivo es garantizar un salario digno que permita sostener a una familia de cuatro integrantes, tomando como punto de partida un ingreso mensual de 1,750 dólares.
